¡Qué pronto concluye un año y principia otro! Lo uno nos causa nostalgia y lo otro nos sitúa en el umbral de la esperanza. En relación con lo primero, podemos reflexionar y valorar porque ya se consumó, y de ello sacar conclusiones para progresar, mientras que el inicio de un año representa una nueva oportunidad que nos da la vida.

Los seres humanos tenemos el privilegio de discernir, bien sea para templar ánimos y reiniciar proyectos, si fuera el caso, o bien para atemperar emociones y buscar el equilibrio en todo aquello que depende de nuestra voluntad.

Para quienes integramos la gran comunidad tecnológica, nos queda la satisfacción de que afrontamos los hechos según se presentaron, y que tradujimos en actos significativos el proyecto inicial de alcanzar metas que nunca antes se habían conseguido.

Gracias por el esfuerzo desplegado, por el compromiso y la responsabilidad con que participan; gracias a todas y a todos. Hemos tenido resultados muy positivos: crecimos, realizamos cambios académicos trascendentales y consolidamos logros que veníamos madurando de tiempo atrás. Empleemos esto como impulso para ser mejores con excelencia y valores. Démonos las gracias aquí, hoy y mañana.

Llegar al final de un ciclo o de un proyecto es muy satisfactorio y con ese ánimo deseo para todos que esta Navidad, la magia sea nuestro mejor atuendo, la felicidad nuestro mejor regalo y nuestros anhelos nuestro mejor ingenio. No olvidemos que el mejor festejo que podemos hacer siempre será en compañía de nuestras familias.

¡Feliz Navidad y Próspero Año 2013!

Dr. Carlos Alfonso García Ibarra
Director General